El retraso de la Semana Santa, que este año ha resultado particularmente tardía, se ha dejado notar en los datos de empleo del primer trimestre publicados hoy por el INE. La EPA confirma un descenso en la cifra de ocupados en 69.800 personas.
De enero a marzo el número de desempleados en España aumentó en 17.200 personas para dejar una tasa de paro del 18,75%.
Esta suma de malos datos está muy vinculada con la estacionalidad del empleo turístico y el creciente peso del sector en la economía española y el mercado laboral. Los datos del segundo trimestre incluirán ya el efecto de la Semana Santa y del arranque de la temporada estival.
Todo apunta a que en este ejercicio se superará de nuevo el récord que marcó el turismo en 2016, con 75 millones de visitantes, lo que supone un incremento interanual de casi el 10%.
Si a eso se le añade la mejora del consumo interno, el resultado es que la cifra de vacantes registradas en InfoJobs en el sector de turismo y restauración aumentó un 45% en 2016 respecto al año anterior. En total, fueron 116.327 puestos más los ofertados, el doble que en 2014.
Este sector es relevante porque actúa como puerta de entrada para muchos jóvenes sin experiencia laboral previa, un rango de edad con altas tasas de paro. Y aunque existen puestos vinculados al turismo y la restauración que reclaman una alta cualificación y ofrecen buenas condiciones, el grueso de las ofertas se mantiene en el escalafón salarial más bajo. Así, el salario bruto anual promedio de 18.000 euros que registraron las vacantes de este sector en 2016 supone 5.200 euros menos que la media y es ligeramente inferior al registrado al año anterior, con un descenso del 2%.
El turismo es una gran industria española: ha de actuar como tal y las excelentes previsiones para este 2017 lo reclaman. Puede y debe captar el mejor talento; y considerarlo como merece.